Amiot

Félix Amiot nació en Cherburgo el 17 de octubre de 1894 y falleció en Suresnes el 21 de diciembre de 1974. Fue un industrial francés y constructor de aviones, algunos de los cuales sirvieron en las fuerzas aéreas francesas durante la Segunda Guerra Mundial, y de barcos pesqueros, de recreo y navales en Cherburgo1, incluidas las lanchas rápidas Combattante.

En 1908, su familia abandonó Cherburgo y se trasladó a Issy-les-Moulineaux, en los suburbios de París, donde los pioneros de la aviación -Blériot, Voisin y los hermanos Farman- estaban instalando sus hangares y probando sus máquinas, en un campo de entrenamiento utilizado por los regimientos de caballería. Esta proximidad le animó a dar el paso. En 1912, en un garaje cercano al campo, Félix Amiot construye su primer avión, el Amiot 01.

En septiembre de 1913, registra su primera patente para un «sistema de distribución para motores de combustión interna fijos o rotativos de dos o cuatro tiempos».

En septiembre de 1914, Félix Amiot se alista para ir al frente. En octubre de 1915, es llamado a retaguardia a petición de Morane-Saulnier. Allí desarrolla un procedimiento de ensamblaje de piezas metálicas por estampación que interesa a la industria aeronáutica y llama la atención de Louis Loucheur, encargado de los asuntos de la industria de defensa en el seno del gobierno. Loucheur ofreció a Amiot la posibilidad de dirigir una planta de fabricación de aviones. Con la ayuda financiera de Pierre Wertheimer, propietario de los perfumes Chanel y Bourjois, Amiot fundó su primera empresa, la Société d'emboutissage et de constructions mécaniques (SECM). SECM fabricaba y reparaba aviones Morane-Saulnier, Breguet y Sopwith.

Amiot desarrolló bombarderos; sus nuevos modelos, el 370, el 350 y el 340, fueron reconocidos y admirados: entre septiembre de 1937 y agosto de 1939, el Amiot 370 pilotado por el comandante Maurice Rossi batió una serie de 11 récords de velocidad sobre 1.000, 2.000 y 5.000 m y con cargas de 500, 1.000 y 2.000 kilos. En agosto de 1938, el prototipo Amiot 340 fue elegido por el General Vuillemin, Jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Aéreas francesas, para una visita diplomática a Berlín. A partir de 1938, las Fuerzas Aéreas francesas encargaron más de 1.800 Amiot 350 y sus derivados. La SECM recibió numerosas solicitudes para adquirir la licencia de fabricación del avión o para encargarlo.

El 3 de junio de 1940, en Le Bourget, los talleres y las fábricas fueron duramente bombardeados. Los alemanes las ocuparon, las saquearon ampliamente y las transfirieron a Junkers. Amiot financió de su propio bolsillo una red que consiguió pasar de contrabando a una docena de personas al norte de África y transmitir información a los británicos. Desgraciadamente, la red fue desmantelada en mayo de 1943 cuando la Gestapo detuvo a su líder, Yves Maurice, en Perpiñán.

Amiot se asoció con la fábrica Junkers Flugzeug-und-Motorenwerke para construir 370 aviones de transporte Junkers Ju 52. Tras la Liberación, el centro construye estos aviones con el nombre de Amiot AAC.1 Toucan.
Amiot salió de la guerra con buena salud financiera. Sin embargo, el 6 de septiembre de 1944, él y la dirección de la SECM son detenidos acusados de colaboración y comportamiento antisocial, antes de ser puestos rápidamente en libertad. En noviembre de 1944, la SECM fue requisada, requisición que se transformó en nacionalización en 1946 mediante una venta amistosa al Estado, poniendo fin a sus actividades aeronáuticas.

Tras la guerra, se dedica a la construcción naval. Diseñó lanchas militares que la empresa exportó a todo el mundo. Algunas de ellas se hicieron famosas con el nombre de lanchas de Cherburgo, cuando se las llevó Israel, que las había encargado, contra la orden de embargo del general De Gaulle.